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Hoy vengo con una receta que me encanta y no puede ser más sencilla. Un bizcocho esponjoso y tierno, con un irresistible e intenso sabor a naranja y aromatizado con canela y vainilla para darle un toque muy especial. Entre sus ingredientes no hay lácteos ni huevos, por lo que es apto para veganos, y además tiene muy poca grasa, por lo que es mucho más ligero que un bizcocho tradicional. ¿Te animas a prepararlo? Es de las recetas de bizcocho más sencillas que he hecho, ideal para principiantes.
DIFICULTAD: muy fácil
TIEMPO: 15 minutos + horneado
INGREDIENTES:
- 200 g de harina
- 100 g de azúcar
- 1 cucharadita de bicarbonato sódico
- 1 cucharadita de levadura química
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 1 pizca de sal
- el zumo de 2 naranjas grandes (250 ml aprox)
- 2 cucharadas de aceite de girasol
- 1 chorrito de vinagre blanco
-
1 cucharadita de aroma de vainilla
ELABORACIÓN:
1. Comenzamos tamizando la harina en un bol y añadiéndole el azúcar, el bicarbonato sódico, la levadura, una pizca de sal y la canela en polvo. Removemos bien.
2. Encima añadimos el zumo de naranja, el aceite, el vinagre y la vainilla y removemos hasta que esté mezclado.
3. Ponemos la mezcla en el molde elegido, forrado con papel vegetal y horneamos a 180ºC durante una media hora, hasta que esté dorado y al pincharlo en el centro con una aguja, ésta salga limpia.
Sugerencia de la Cocina de Alimerka:
Mi recomendación es que utilices un molde redondo no muy grande, de entre 20 y 23 cm. Si buscas un sabor aún más intenso a naranja, prueba a añadir también la ralladura de una de ellas. El bizcocho se conserva perfectamente hasta una semana en un recipiente hermético forrado con papel vegetal.